Mariposa
- Introducción
El estilo de mariposa es uno de los estilos de natación más atractivos y estéticos que existe en este deporte. A la vez, es uno de los estilos más complicados de realizar para la gente que está en proceso de iniciación. Nace de manera oficial en los años cincuenta, según algunos autores, como evolución del estilo pecho que se había desarrollado varios años atrás, en los años veinte. Es un estilo similar al de braza por sus movimientos, pero presenta diferencias en el movimiento de brazos y en el movimiento de piernas. Existen varios tipos de pruebas que se suelen nadar en este estilo: 50 metros, 100 metros o 200 metros, siendo esta última la más famosa. Además, la mariposa también forma parte del nado por estilos y podemos encontrar diversas pruebas en este apartado: 100 metros estilos individuales (piscina de 25 metros), 200 metros estilos, 400 metros estilos y finalmente 4x100 metros estilos. Para poder entender este estilo con mayor facilidad vamos a realizar un análisis de sus puntos claves.
- Posición del cuerpo
La posición del cuerpo en este estilo es similar a la de braza en varios aspectos. El nadador se coloca en un plano horizontal y boca abajo en el agua. El cuerpo lleva una posición básica en la que se encuentra totalmente estirado. En esta posición básica los hombros se encuentran ligeramente por encima de los pies, rozando la superficie del agua. Esta posición básica se modifica cuando el pecho y el torso se elevan por encima de la superficie del agua para realizar el recobro, mientras que en la tracción las piernas se encuentran por encima de los hombros. Otro aspecto importante a destacar en este análisis es la ondulación que se produce durante la realización de la técnica de mariposa y el desarrollo del nado, y gracias a esta ondulación podemos avanzar.
- Movimiento de las piernas
El movimiento de las piernas en este estilo es un movimiento simétrico y simultáneo, en el cual las dos piernas se mueven a la vez coordinadamente realizando la patada. Este batido o patada tiene una gran importancia en el empuje y la propulsión del nadador en este estilo de natación, ya que si no se realiza correctamente perderemos velocidad y aerodinámica, influyendo también negativamente en la acción de los brazos. El batido de las piernas se puede dividir en dos fases: una ascendente y otra descendente. En la fase ascendente las piernas se encuentran estiradas, mientras que en la fase descendente las piernas se encuentran flexionadas para conseguir el impulso necesario. En el movimiento de piernas tiene una gran importancia la altura y la acción de las caderas, que tienen que estar en un constante balanceo a la hora de realizar el batido. Otro aspecto que tenemos que tener en cuenta es la posición de los tobillos, que tienen que estar relajados y estirados para la correcta realización del batido.
- Movimiento de los brazos
El movimiento de los brazos en mariposa es similar al movimiento de los brazos en crol pero podemos encontrar varias diferencias. La primera y la más destacada es que este movimiento de los brazos es simultáneo, lo que quiere decir que los brazos se mueven a la vez. En este movimiento de brazos también podemos encontrar dos fases comunes: el recobro y la tracción.
Se le denomina recobro a la fase del movimiento de brazos en la cual estos salen del agua. Esta fase comienza con la elevación de los brazos por encima de la superficie del agua. En esta fase los brazos salen con los pulgares con dirección hacia abajo. Los brazos van a mantener un trazo común en este movimiento, que los codos deberán ir ligeramente flexionados para poder llevar los brazos hacia delante en la entrada en el agua de estos.
Se le denomina tracción a la fase del movimiento en la cual los brazos están sumergidos en el agua y que comienza con la entrada de las manos en esta. Como acabamos de comentar, la primera parte del brazo que se sumerge por debajo de la superficie del agua son las manos. En el momento que esta entra en el agua comienza el barrido hacia fuera, que lo podríamos denominar empuje hacia fuera, con las palmas de las manos en dirección hacia fuera y extendiendo los brazos para realizar una presión sobre el agua y conseguir el impulso necesario. A continuación de este movimiento se realizará el barrido hacia dentro, en el cual las manos se dirigen simultaneamente hacia el interior hasta llegar a un punto en el que casi se juntan. En esta parte del movimiento los codos van flexionados para permitir el movimiento hacia dentro. Para finalizar, se realiza un empuje o barrido hacia atrás o ascendente, en el que las manos continúan realizando el empuje hasta la altura de la cadera, aproximadamente, para luego volver a romper la superficie del agua.
- Coordinaciones
En es estilo de mariposa podemos encontrar dos tipos de coordinaciones para ejecutar correctamente la técnica: coordinación piernas-brazos y coordinación de la respiración.
En la coordinación piernas-brazos tenemos que tener en cuenta que en este estilo es muy necesario que los brazos y las piernas realicen sus respectivos movimientos conjuntamente para conseguir la aerodinámica y el impulso necesario. Para empezar, por cada ciclo de los brazos le corresponden dos patadas. La primera de las patadas se inicia cuando los brazos están entrando en el agua, de forma que se realiza la primera fase descendente y acaba con la fase ascendente en mitad de la tracción, en el momento en que los brazos se encuentran realizando el barrido hacia el interior. La segunda patada descendente se realiza a la vez que los brazos comienzan su barrido ascendente y continua en su fase ascendente cuando los brazos se encuentran realizando el recobro, buscando así una posición alienada y estirada del cuerpo con los pies cerca de la superficie del agua.
En la coordinación de la respiración hay que destacar que es uno de los elementos más importantes a la hora de la puesta en práctica de este estilo de natación. En mariposa, la cabeza no sólo tiene que ir mirando hacia el suelo o el fondo de la piscina. Todo lo contrario, la cabeza tiene realizar varios movimientos y son escasos los momentos en que se encuentra relajada. Antes de empezar a explicar sus movimientos tenemos que tener en cuenta de que en el ámbito profesional los competidores realizan la respiración cada dos ciclos, lo que se dice que les da más aerodinámica y velocidad. Para las personas que no nadan profesionalmente el método más común es la respiración en cada ciclo de mariposa. La cabeza rompe la superficie del agua en el momento en el que los brazos se encuentran en la fase ascendente y están a punto de salir del agua. En ese momento se realiza la inspiración y se volverá a meter la cabeza cuando los brazos se encuentren en la mitad de la fase de recobro, aproximadamente. Un punto importante es que la cabeza no se mantenga mirando al fondo de la piscina en la fase submarina, sino que mantenga la mirada hacia delante para así poder facilitar la salida a la superficie.
- Bibliografía
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